Con el objetivo de verificar la escalabilidad de los resultados de la tesis de la doctora Adrianna Nogalska (que sirve de base para desarrollar el proyecto como se explicó anteriormente), han empezado las pruebas de un módulo ampliado en los laboratorios Eurecat en Tarragona.

El módulo, como se muestra en la imagen, es una caja de 120x120x200mm con un volumen interno de aproximadamente 1 litro. En cada cara vertical hay una carcasa para colocar la membrana de polisulfona. Dentro del módulo, el hidróxido estará en contacto con la membrana, separándose físicamente del aire que rodea el módulo.

La membrana debe evitar que el hidróxido se evapore mientras se preconcentra suficiente dióxido de carbono en su cara externa para permitir que pase por sus poros.

Hay dos hidróxidos distintos que pueden ser candidatos para llevar a cabo la reacción química: hidróxido de potasio e hidróxido de bario. El primero, una vez que reacciona con el CO2, forma carbonato de potasio que luego puede usarse para obtener ácido fórmico. El hidróxido de bario, por el contrario, precipita en carbonato de bario y por lo tanto es más fácil de eliminar del módulo.

Los resultados de las pruebas darán las pistas para continuar con el desarrollo del módulo.